AMN RV

Lima revuelta

“César Moro, el poeta, no era ningún pueblerino cuando retornó a Lima después de vivir en París por décadas y, sin embargo, fue para él “la horrible”, epíteto que trató de entender Sebastián Salazar Bondy en su célebre ensayo de 1964”

 

Por: Alfredo Quintanilla 

 

“Hay un hambre que es tan grande como el hambre del pan. Y es el hambre de la injusticia, de la incomprensión. Y la producen siempre las grandes ciudades donde uno lucha, solo, entre millones de hombres indiferentes al dolor que uno grita y ellos no oyen.” (Enrique Santos Discépolo)

 

Cuando una persona criada en un pueblo se encuentra con una gran ciudad puede experimentar, eso que los psicólogos llaman un trauma. Las avenidas y la velocidad de los autos, las multitudes, los edificios, el ritmo acelerado del tiempo, las relaciones líquidas con la gente, los contrastes de opulencia y miseria, crimen y arte, ruidos y música, generan confusión y sobresalto, adrenalina y desánimo, la sensación de estar a punto de sufrir un resbalón, que sólo irá superándose conforme pasen los meses y lleguen la acogida de las nuevas amistades.

 

César Moro, el poeta, no era ningún pueblerino cuando retornó a Lima después de vivir en París por décadas y, sin embargo, fue para él “la horrible”, (puede leerse el testimonio de Vargas LLosa sobre cómo le hicieron la vida a cuadritos los cadetes del Colegio Militar Leoncio Prado), epíteto que trató de entender Sebastián Salazar Bondy en su célebre ensayo de 1964. A contramano del optimismo de El otro Sendero de Hernando De Soto que ve en los habitantes de sus cerros a futuros millonarios, la mala fama de Lima ha persistido, sobre todo en la literaria (Montacerdos de Jara, Matacabros de Galarza, Ciudad de Payasos de Alarcón o Taxi Driver sin Robert De Niro de Ampuero), aunque sociólogos como Jaime Joseph y Elio Martucelli en este siglo se fijen más bien en las potencialidades de sus pobladores para el cambio.

 

Este aniversario de la fundación de la antigua ciudad de Los Reyes, trae como novedad el lanzamiento de Bajo la panza de burro de Felipe Revueltas, un conjunto de relatos “para soportar la capital” según declara el subtítulo, con el explícito propósito de “amortiguar el mal concepto que se tiene de la capital peruana”. Pero las buenas intenciones no quedan allí, sino que el íntegro de la primera edición está siendo distribuida gratuitamente por su autor. Tamaño desprendimiento o bien calculada estrategia marketera, culminan en la síntesis




There are no comments

Add yours